Uno de los picos más bonitos y emblemáticos de todo el Pirineo, con «personalidad» propia.
Esta ascensión no es adecuada para quienes sólo hacen senderismo, ya que exige manejarse con soltura en trepadas y alta montaña. Muy recomendable llevar arneses y cuerdas (y saber usarlas), especialmente para rapelar las chimenas de bajada.
Cómo llegar : desde Huesca, dirigirse a Sabiñanigo, y después por Biescas a Sallent de Gállego, desde donde ya sin pérdida alcanzamos la frontera en el Portalet, de donde ya divisamos la mole vertical del Midi.
Dificultad: PD (trepadas de III grado)
Desnivel: 1450 m +.
Tiempo de ascensión: Desde el parking de Aneaou, 4 o 5 h para subir, y lo mismo más o menos para bajar, dependiendo del tráfico y de la cantidad de gente que seamos.
Dejando atrás El Portalet aparcamos el coche en Anéou, desde donde se comienza la aproximación hacia al Refugio de Pombie para lo que tenemos que pasar por Col del Soum de Pombie. Desde el refugio se va en busca del collado de Souzón (2.127m).
La dificultad de la ascensión se concentra en las tres famosas chimeneas. La primera es la más técnica y se va a necesitar cierta habilidad trepando, tiene una longitud de unos 15 metros y los agarres son algo escasos. Conviene asegurar si no se trepa con soltura.
La segunda es muy vertical y aérea pero tiene buenos agarres, esta tiene unos 30 metros y con diferencia es la más expuesta, aunque compensa la cantidad de buenas presas. Andar con ojo.
La tercera es la más larga pero también es la más fácil. Se pasa sin mucha dificultad por su lado derecho.
Las tres chimeneas están equipadas para rapelar en la bajada. Nosotros rapelamos las dos primeras.
Seguimos la fuerte subida hasta la cruz metálica del paso del Portillón, ya a 2.657 msnm. A partir de allí, por el Rein de Pombie, a la cumbre con menor dificultad.